Parafraseando al viejo Bertol, antes vinieron por los uruguayos y yo no me preocupé, porque no era uruguayo. Ahora nos la tenemos que comer doblada.
Habría que mostrarle a los bienpensantes donantes voluntarios de esta organización ecologista adónde van a parar sus aportes monetarios. Y qué piensan sus directivos acerca de los que luchan todos los días contra la contaminación.
Sólo la unidad del sur, de verdad, sin mezquindades, permitirá enfrentar a estos filibusteros disfrazados de verde. Y hacerles entender que el desarrollo económico y la lucha contra la pobreza de nuestros países no se negocia.
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